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10 millones de usuarios en solo cinco años. ¿Quién los consiguiera, verdad? Pues es la cifra con la que LinkedIn cerró 2017. Es posible que si los comparas con los 23 millones de Facebook no te parezcan muchos, pero ten en cuenta un pequeño detalle: mientras que la compañía de Marc Zuckerberg es una red generalista, en la que todo el mundo es bienvenido, LinkedIn está pensada solo para personal directivo, profesionales de todos los ámbitos y, en general, el colectivo de personas trabajadoras. En ella se comparten conocimientos, currículos, se ofertan puestos de trabajo, se contratan servicios profesionales… Es un escaparate laboral con más de 480 millones de clientes potenciales en todo el mundo. ¿Aún tienes dudas de si merece la pena estar registrado? Seguro que no.
Pero con LinkedIn ocurre como con todo: no basta con que tengas un buen perfil profesional, también tienes que vestirlo y enseñarlo. Y para ello no basta con elegir una bonita foto y destacar todo tu currículo, que también: tienes que mantener tu perfil vivo, alimentarlo y dotarlo de contenido. Así que prepárate para tomar nota de los consejos que te vamos a ofrecer para que luzcas un perfil en LinkedIn acorde a tu preparación.
- Personaliza tu URL. Este tema no es negociable: no tiene nada que ver una URL que incluya tu nombre y apellido que otra compuesta por números y letras al tuntún. Así que pincha en Editar Perfil, sitúate sobre la URL actual que está bajo tu nombre y espera a que aparezca el icono de los ajustes. Al clicarlo te saldrá la opción de Crear una URL personalizada. Pon tu nombre y apellidos, pero sigue leyendo porque te permite añadir algo más que quizá te ayude.
- El SEO funciona en LinkedIn. Si pensabas que las palabras clave o keywords no son importantes en esta red, te equivocas: importan y mucho. Debes usarlas en tu presentación y distribuirlas convenientemente por tu perfil, por eso tienes que elegirlas bien. Para hacerlo, piensa en cuáles son los términos clave de tu profesión, los que usaría uno de tus clientes potenciales. Y después intenta distribuirlas con sentido en todas las secciones de tu perfil: incluso puedes incluir la más representativa en tu URL personalizada.
- Únete a grupos de tu sector. Es muy interesante que identifiques algunos de los grupos más relevantes de tu sector para que te añadas a ellos. Solo con ello tus contactos recibirán esta noticia y las interacciones que realices en el grupo. Y al estar en un grupo sectorial podrás entrar en contacto con el resto de sus miembros.
- Comparte información útil y con valor. Ésta es una red profesional en la que se aprecian los conocimientos y funcionan las recomendaciones. Por eso debes escribir y compartir contenidos interesantes. En la medida en que te consolides como una referencia para tus seguidores tus publicaciones serán recomendadas y compartidas, y tu perfil llegará a más personas.
- Crea tu propia red de contactos. No sumes contactos a lo loco: hazlo de forma paulatina. Consolida los que tienes y tu red se afianzará. Y si acabas de llegar a LinkedIn, invita primero a tus compañeros y conocidos del sector: ya tendrás tiempo de ir ampliando tu red.
- Personaliza los mails. Si ya estás en una fase “expansiva”, asegúrate de que los mails que envías para invitar a conectar con tu red están personalizados. A nadie le gusta recibir los mensajes preestablecidos del servicio de mensajería de la red, ¿verdad? Así que esmérate un poco e intenta conseguir que esa persona se sienta especial.
- Utiliza las menciones. Si al publicar un post quieres que una persona determinada o varias lo lean, busca la excusa apropiada para mencionarlas. Cuando lo hagas, esos contactos recibirán una notificación y leerán tu comentario. Para realizar estas menciones, solo tienes que utilizar la @ seguida del nombre de contacto que te interesa.
- Utiliza contenido gráfico. Para que tu perfil sea más atractivo es conveniente que incluyas presentaciones y vídeos. Por ejemplo, las infografías sobre temas relevantes en tu sector son elementos visuales muy poderosos para captar la atención de otros profesionales. Para ello te pueden servir las herramientas para diseñar las comunicaciones con tus clientes de las que ya te hemos hablado alguna vez.
- Incluye vídeos. La utilización de un vídeo o un videoclip corto, ameno y, sobre todo, visual, puede resultar mucho más efectivo que un texto genial. Recuerda que si el vídeo incluye comentarios, es conveniente que los subtitules para que los usuarios de Smartphone, que habitualmente no los escuchan, tengan la posibilidad de leerlos.
- Consigue recomendaciones. La recomendación de un cliente satisfecho en la que detalla el servicio que le has prestado, pero sin empalagar, puede ser el elemento definitivo para que otro usuario te contrate. Así que sugiéreselo a tus clientes. No les llevará más de unos minutos.
Y recuerda que, además, LinkedIn te puede ayudar a crear una reputación digital de manera gratuita, así que dedícale un poco de tiempo y aprovecha sus ventajas.
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